Portafolio es un término de origen francés
“portefeuille” traducido como monedero o cartera de mano, habiéndose utilizado ya en la década del 20
por Freinet como herramienta de aprendizaje[1]
; luego hacia los años 60, su uso fue
asociado al movimiento de la escuela activa, según el origen y evolución de dicho instrumento descripto por la
Dra Haak .
También se
puede definir como:
“…una selección deliberada de los
trabajos del alumno que nos cuenta la historia de sus esfuerzos, su progreso
o sus logros. En él deben incluirse la participación del alumno en la
elección de su contenido, los criterios de la selección y las pautas para
juzgar sus méritos, así como las evidencias de su proceso de autoreflexión (Arter,
1990, p. 27)” [2]
Es así
como a principio del siglo XXI, la
internet ha posibilitado la formación de portafolios digitales como herramienta
de evaluación para el logro de la auto reflexión y revisión de los
aprendizajes, siendo éste el objetivo planteado desde la cátedra del Seminario
de Evaluación de los aprendizajes, dictado por la Dra Mirian I Capelari en el
marco del desarrollo del Doctorado en Educación en la Universidad Católica de
la ciudad de Santa Fe – UCSF
